
—Cada uno de mis días sin ti son un sin vivir. Deja de reír papi, pensando que sigo con el mismo rollo, sabes de sobra lo que quiero decir; nunca dejaré de hacerlo. —En negro fuel, de blanco riguroso, en gris— te (…)
—¡SSHSSS!
—¿¡SSHSSS!? —Ni pestañeo, sin palabro—. Papi, te adoro.
—Sólo hoy, déjame aquí decirte: ¡Felicidad/es, papi! al igual qué (…) déjame que llore. —No es tan horrendo y, es que llevo conmigo tu pañuelo; constantemente. Necesito sentirme niña —tu niña Lola— eternamente. Déjame papi, leerte un poema de Miguel Martí i Pol, mientras escucho contigo a Manolo Caracol, como antaño; sin pretender molestarte, sólo hoy papi y también déjame volver a decirte —gracias— (…)
Me cuesta imaginarte ausente para siempre. Se me agolpan tantos recuerdos tuyos que no dejan lugar a la tristeza y, sin tenerte, te vivo intensamente. No quiero hablarte con voz melancólica, tu muerte no me quema las entrañas, ni me angustia, ni me quita la alegría de vivir; me duele saber que ya no podremos compartir el pan o hacernos compañía; pero en ese dolor hallo las fuerzas para escribir estas palabras y recordarte. Me empeño en crecer con más tesón que nunca sabiendo que conmigo tú lo haces: proyectos, ilusiones, deseos, alzan el vuelo contigo y por ti, por muy lejos que de ti estén, y contigo y por ti sueño cumplirlos. Te me haces presente en las cosas pequeñas y es en ellas que pienso en ti y te evoco, seguro como nunca de que la única esperanza de sobrevivir es amar con bastante fuerza para transformar lo que hacemos en vida y sostener la esperanza y la belleza. Tú ya no estás y florecerán las rosas, madurarán los trigos y quizás el viento desvele las ocultas melodías; tú ya no estás y ahora pasa el tiempo entre el recuerdo tuyo que me arrulla, y aquel empeño, que tan bien conoces, en resistir cuando nada nos alienta. Pienso en ti con ternura desde estas palabras mientras con suavidad cae la tarde. Todos los colores proclaman una vida nueva que yo vivo, y en ti se me representa vibrante y armoniosa de una extraña manera. No volverás jamás, pero perduras en las cosas y en mí de tal manera que me cuesta imaginarte ausente para siempre.
— Loli Lopesino
Imagen: Loli Lopesino
Poema Martí i Pol
Tremendo. Desgarrador.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Ciertamente… Me alegra mucho leerte, de veras. ¡Gracias..!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Hermosísimo pensamiento. Acogido entre astros, ya ilumina tus pasos, ya brilla tu aliento. (Ánimo. Un abrazo Loli).
Me gustaLe gusta a 1 persona
😘
Me gustaMe gusta